Los hospedajes consisten en módulos de línea sencillas y rectangulares construidos en madera maciza, reciclables y colocados sobre piquetes con anclaje al suelo. Constan de habitaciones para dos personas, restaurante self-service para 50 invitados y un cyberpoint en cada una de las localidades.
El plan prevé la creación de 320 empleos tanto en España como en el país galo; de ellos, 60 serán en los restaurantes y 25 en la central de reservas de los peregrinos. En total, se establecerán cinco nuevos puestos de trabajo en cada localidad.
El plan persigue que los módulos sean financiados de manera privada por ciudadanos de los municipios por donde transcurre la ruta, peregrinos y empresas comerciales e industriales. No obstante, la empresa se responsabilizará de su gestión en la temporada álgida del Camino compostelano, de unos 150 días, con un pago a los poseedores.
El resto del tiempo, los propietarios de los módulos podrán gestionar personalmente sus alojamientos, tanto para uso particular como para alquiler de cualquier tipo de evento. La compañía también se hará cargo de la instalación y de la puesta en marcha de los módulos.
El resto del tiempo, los propietarios de los módulos podrán gestionar personalmente sus alojamientos, tanto para uso particular como para alquiler de cualquier tipo de evento. La compañía también se hará cargo de la instalación y de la puesta en marcha de los módulos.
Fuente: Diario de León
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