jueves, 11 de agosto de 2011

Nueva vida laboral después de la banca


La nube negra que cubre el mundo financiero parece que aún tardará un tiempo en disiparse. Los ajustes acometidos en España para remodelar su sistema bancario han provocado que el número de empleados en el sector se haya reducido en más de 14500 puestos hasta 2010. Abrir su propia consultoría, trabajar como agente financiero o plantearse un cambio de residencia son algunos de las opciones que les puede deparar el futuro.
Empezar de cero no es fácil pero puede verse como una oportunidad para dar un giro en su carrera profesional y aportar nuevas experiencias a la vida laboral. La reestructuración de cajas y bancos ha tocado todas las ramas del sector, pero existen algunas áreas que se han visto más perjudicadas que otras. Orestes Wensell, director comercial del Creade indica que “se pueden diferenciar dos áreas principales como son las de servicios centrales, afectados por los procesos de concentración y fusiones, y la de las redes de oficinas, que sufre un ajuste de la red a los volúmenes de crédito actual, y que es la que más perjudicada se está viendo”.
Dentro de las plantillas los que más están notando la transformación son los trabajadores temporales y los profesionales con mucha antigüedad y edades superiores a 53 años que se acogen a bajas voluntarias y prejubilaciones.
Pero no todo es negativo para el sector. Los profesionales financieros tardan menos tiempo en encontrar un nuevo puesto que el resto de sectores. Según el informe de recolocación elaborado por Creade, las personas que provienen de este campo y desean incorporarse a un nuevo proyecto profesional lo consigue en un tiempo medio de poco más de cuatro meses frente a los casi seis que tarda la media general.
Alternativas que ofrece el mercado
Intentar encontrar una salida común para todos los profesionales es casi imposible, cada uno cuenta con unas habilidades y motivaciones que les permitirán encajar mejor en un campo o en otro. Sin embargo, existen sectores cercanos donde la experiencia adquirida puede encajar a la perfección, como son: el mundo de los seguros, asesorías y buffetes de abogados. Uno de los perfiles que se encuentran ahora mismo en auge es el de agente financiero con cartera propia de clientes. Esta profesión se encuentra cada vez más demandada por las entidades bancarias que necesitan agentes capaces de conseguir inversores que apuesten por sus productos.
Crear su propio empleo puede ser también una opción interesante. Para un profesional senior los conocimientos acumulados y los contactos conseguidos le serán de gran ayuda. Pero como señala Wensell, “El candidato debe contar con un proyecto empresarial, viable y claro, teniendo presente los retos y barreras de esta alternativa profesional. Por lo que nunca debe ser la primera opción si no se han valorado otras previamente”
Recíclece y arriesge
Si a pesar de todo se quiere seguir ligado a la parcela financiera aún quedan algunas puertas a las que llamar. Según el equipo de Finanzas y Banca de Randstad, el profesional por el que más se decantan en esta difícil etapa los bancos, es aquel que tenga un perfil enfocado a riesgos y créditos. Las entidades urgen de personal capaz de renegociar las fórmulas de devolución de los créditos concedidos.
Reciclar los conocimientos es una pieza clave, la formación económica y financiera sigue siendo primordial pero cada vez se valora más positivamente contar con estudios enfocados a los recursos humanos, la psicología o el derecho. Un salto más arriesgado pero que puede garantizar el desarrollo de la carrera en este ámbito son los traslados internacionales.
El abanico de alternativas es variado y amplio, sólo hay que saber cuál se adecua más al perfil y motivaciones de cada uno y ser más abiertos a cambios salariales, funcionales e incluso geográficos.
Fuente: Expansión

No hay comentarios:

Publicar un comentario